Hemorroides
Las hemorroides o almorranas son un problema incómodo que produce una sensación de quemazón, y afecta a un gran número de personas por lo menos una vez en la vida. También son molestas y pueden causar bastante dolor, aunque en la mayoría de los casos no son peligrosas. Muchos de los que sufren esta enfermedad no buscan tratamientos adecuados porque no saben que existen, o sienten vergüenza o miedo de visitar a un médico, ya que los exámenes con el anoscopio, sigmoidoscopio y proctoscopio les resultan bastante incómodos y hasta dolorosos.
Los nódulos de las hemorroides por lo general son pequeños y lucen como una estructura anatómica normal en la pared del recto. Éstos consisten mayormente en vasos sanguíneos entrelazados que difieren en su estructura de los vasos sanguíneos típicos. La falta de musculatura se traduce en que las paredes de los vasos sean muy delgadas y por tanto más susceptibles a lesiones. Las hemorroides también consisten en tejido conectivo elástico y en una capa de tejido muscular liso. En circunstancias normales, las hemorroides participan en el control de excremento líquido (diarrea) y gases.
Las hemorroides son la causa más común del sangrado en el recto y los problemas relacionados con ellas surgen cuando hay flatulencias frecuentes, enfermedades del hígado, embarazo y otros factores que incrementan la presión en la vena porta, dando lugar a la inflamación de los vasos sanguíneos, que es una condición similar a las venas varicosas en las piernas.
Esta enfermedad ano-rectal es más común en los hombres, pero a menudo las mujeres la sufren durante el embarazo o después del parto.El aumento de las hemorroides es causado por un estilo de vida acelerado y estresante. Los factores hereditarios, la edad, malos hábitos alimenticios y el estilo de vida moderna son las razones principales para que un 50 % de la población en edades mediana y mayor sufra problemas ocasionales o frecuentes causadas por el aumento de las hemorroides.
Tipos de hemorroides
Las hemorroides se clasifican según su tamaño y ubicación. Según su ubicación, se dividen en internas y externas; y según su tamaño, se clasifican en 4 tipos.
Por ubicación:
| • Las hemorroides internas se sitúan en el ano y son menos severas puesto que el recto no posee muchas terminaciones nerviosas. Normalmente no producen dolor y se pueden identificar por rastros de sangre fresca en el papel higiénico, inodoro o en las heces. Por lo general el sangrado es escaso y rara vez causa una hemorragia mayor. En la mayoría de los casos, estas hemorroides consisten en venas pequeñas inflamadas en las paredes del ano, y pueden crecer, pender y escabullirse, sin embargo pueden retraerse solas o con ayuda (presionando cuidadosamente con un dedo). En los peores casos cuando no se retraen, éstas son oprimidas por los músculos del ano, lo que impide la circulación sanguínea a las hemorroides, originando coágulos que producen mucho dolor. En tales casos, se pueden ver rastros de mucosa en el papel higiénico o en las heces.
• Las hemorroides externas se localizan bajo la piel por fuera del ano. Debido a la mayor enervación del ano, éstas son muy sensibles y más dolorosas, pueden producir picazón, sangrar, y además son susceptibles a inflamarse. Estas hemorroides pueden irritarse y crear coágulos de sangre, lo que causa nódulos o una trombosis muy dolorosa.
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Con relación al tamaño, podemos mencionar las siguientes etapas:
- Primera etapa: hemorroides ligeramente alargadas
- Segunda etapa: hemorroides considerablemente alargadas que no se han propagado hasta el ano
- Tercera etapa: hemorroides alargadas que se propagan hasta el ano, pero pueden retraerse solas o con ayuda (presionando cuidadosamente con un dedo) después de la defecación.
- Cuarta etapa: hemorroides propagadas que ya no pueden retraerse hasta el ano.
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Síntomas
- Picazón e incomodidad en el área anal
- Sensación de quemazón en el recto
- Dolor en el área rectal
- Sangrado indoloro durante la defecación
- Presencia de sangre color rojo brillante en el papel higiénico
- Prolapso de las hemorroides a través del ano (se siente como nódulos en el borde del ano)
- Dolor durante o después de la defecación
- Sensación de evacuación incompleta (lo que conlleva a deposiciones más recurrentes y más presión)
- Incontinencia intestinal
Cuanto más pronto se descubran las hemorroides más rápido se podrá iniciar el tratamiento, y se obtendrán mejores resultados. La fórmula única de HemoSens cápsulas y ungüento ha probado tener éxito en muchos casos. Ésta puede prevenir el desarrollo de las hemorroides, limitar los síntomas o curarlas por completo. Los buenos resultados del tratamiento pueden ser aun mejores si se adopta un estilo de vida diferente, con una dieta rica en fibra, más ejercicio y mayor consumo de agua.
Causas
Todas las actividades que incrementen la presión en el abdomen y ocasionen la expansión y el debilitamiento de las venas del recto pueden causar hemorroides. Las enfermedades del hígado también son causas muy comunes de esta afección, ya que aumentan la presión en los vasos sanguíneos rectales. Pero estos problemas son causados mayormente por un estilo de vida moderno poco saludable, y llevar una dieta inapropiada basada en comida procesada, con mucho azúcar, sal y alcohol. Todo esto afecta sobre todo a las personas mayores.
Las hemorroides a menudo ocurren durante el embarazo y después del parto.
Algunos de los factores que contribuyen a la aparición de las hemorroides son:
- Predisposición genética
- Esfuerzo durante la defecación
- Tos espasmódica
- Vómitos
- Retención de las heces
- Levantar cosas pesadas
- Estreñimiento crónico
- Diarrea crónica
- Pasar mucho tiempo sentado
- Ingerir bebidas alcohólicas
- Falta de ejercicio físico
- Dieta no saludable y falta de fibra
Prevención
Hay muchos métodos más o menos efectivos para tratar los síntomas de las hemorroides, pero debe saberse que los tratamientos serán mucho más exitosos si se realizan ciertos cambios en el estilo de vida.
Tales cambios son predominantemente preventivos, pero también se recomiendan para la reducción de los síntomas de las hemorroides. Es importante mantener heces blandas y esto se logra con una dieta rica en fibra y el consumo de abundante agua.
- Es importante beber bastante agua: el agua ayuda a adelgazar la materia fecal. La mayor parte del agua se evacúa del cuerpo a través de la orina, pero una parte también por medio de la excreción. El agua no solo adelgaza la materia fecal sino que reduce el estreñimiento. Las personas adultas deben tomar entre 1.5 y 2 litros diarios de agua. Con el fin de reducir los síntomas de las hemorroides, es importante también evitar ciertas bebidas como el café y el alcohol, las cuales tienen un efecto diurético.
- Coma alimentos ricos en fibra: la dieta es la clave para la reducción de los síntomas de las hemorroides. La comida rica en fibra ayuda a crear un balance intestinal y asegura deposiciones regularmente. La fibra se encuentra principalmente en alimentos no procesados, frutas frescas, vegetales y legumbres.
- Haga deposiciones regularmente: es importante establecer un hábito de deposición. No postergue la excreción ya que esto endurece la materia fecal y genera mayor presión.
- Se debe evitar el esfuerzo excesivo durante la defecación.
- No lo postergue. Cuando sienta la necesidad, evacúe.
- Evite usar papel higiénico de colores y con fragancias.
- Use jabón neutral
- El ejercicio regular y apropiado ayuda a restaurar la deposición balanceada.
- Si pasa mucho tiempo sentado, haga pausas para levantarse y caminar.
Tratamiento
Hay métodos de tratamiento que pueden reducir los síntomas o incluso eliminarlos del todo. A menudo se tiene éxito solo con el uso de medidas para aliviar los síntomas.
Desafortunadamente, el tratamiento no es permanente y la disminución completa de las hemorroides no quiere decir que no volverán a aparecer más adelante.
Las hemorroides pueden tratarse con cápsulas que producen efectos benéficos en el sistema digestivo, reducen la presión en las venas del área rectal, reduce el dolor y la incomodidad, y disminuyen el tamaño de las hemorroides. El ungüento también es muy popular ya que reduce la comezón, disminuye el tamaño de las hemorroides y también el dolor y la incomodidad del área alrededor del ano.
Con el fin de lograr efectos óptimos, es necesario que usted haga cambios en su estilo de vida, consuma alimentos ricos en fibra, beba abundante agua y haga ejercicio regularmente.
Medidas
También existen otras medidas recomendables que usted puede adoptar en su casa:
- Tome baños de agua tibia estando sentado. Vierta unos 10 centímetros de agua tibia en una tinaja y siéntese en ella varias veces al día, especialmente después de la defecación.
- Lave el área ano-rectal con agua y un jabón suave sin fragancia.
- Enjuague completamente el ano y límpielo cuidadosamente con papel sin fragancia.
Operación
En muchos casos las medidas son efectivas y alivian o curan completamente los problemas de hemorroides. Si los problemas persisten y las hemorroides se vuelven más dolorosas o se producen mayores sangrados, será necesaria una operación. Los cirujanos utilizan los siguientes procedimientos:
- Hemorroidectomía: este es el método clásico para eliminar las hemorroides. A través de él los nódulos son extraídos completamente.
- Un procedimiento ultrasónico para identificar las venas, y luego se suturan completamente para impedir el flujo sanguíneo.
- Las hemorroides también se pueden tratar con láser, corrientes eléctricas o radiación infrarroja.
- Uso de ligaduras elásticas alrededor de las hemorroides. Al atarlas, éstas se secan y se caen. Esta técnica solo permite tratar un nódulo a la vez y requiere varios procedimientos en un período de tiempo.